Evolución del orangután

Hay pruebas que sugieren que los orangutanes han vivido por más de 70 millones de años. Son parte de la familia de los simios. Hasta hace unos 20 millones de años todos los simios estaban en la misma categoría. Se cree que en ese punto se dividieron en dos grupos distintos. La primera es la de los monos más grandes que incluyen Gorilas, Chimpancés y Orangutanes que también se diferenciaron entre ellos.

Hoy en día sólo quedan dos especies de orangutanes en el mundo. Son distintos y suficientemente separados geográficamente como para ser considerados como especies separadas, sin embargo, todavía están estrechamente relacionados por su genética, de hecho las dos especies pueden reproducirse entre sí sin problemas. Ha sido sólo en los últimos 2 millones de años que el Orangután ha adquirido la forma que tiene hoy en día, fue un proceso lento y aún continúa desarrollándose.

Se cree que hace alrededor de 10.000 años los orangutanes estaban distribuidos a lo largo del planeta y no como se encuentran en la actualidad que se limitan a unas pocas regiones de Asia. Algunas de las áreas donde habitaban incluyen a China, Indonesia y Malasia.

Basados en los fósiles que han sido localizados, se sabe que se extendían hasta el Sur de Java. Estos fósiles son aproximadamente de 40.000 años y se han encontrado a lo largo de las Tierras Altas de Sumatra donde hay fósiles que datan de unos 35.000 años. Lo que se cree es que en ambas áreas los orangutanes fueron utilizados como fuente de carne para las personas que vivían allí. Sin embargo, ya que la población era relativamente pequeña y las herramientas no muy avanzadas se cree que no consumían una gran cantidad.

También hay pruebas en las cuales aparecen pinturas rupestres que indican el uso de los orangutanes como mascotas en épocas muy tempranas, estos eran probablemente las queridas mascotas de los hombres de las cavernas que vivieron allí, sin embargo, también hay indicios de que algunos fueron criados por ellos hasta que los necesitaban como fuentes de alimentos. Era más fácil criarlos y mantenerlos que tener que volver a los bosques para encontrarlos.

Se cuenta con más evidencia sobre la evolución de los orangutanes que de muchos otros animales. Esto es importante porque puede ayudar a abrir el camino para más enlaces con los grandes simios e incluso con los seres humanos. Hay personas que creen en la teoría de la evolución que las personas provienen de los simios y no se puede negar que al examinar el ADN hay alrededor de un 98% de similitud en la codificación genética.

Aunque se conoce bastante acerca de la evolución de los estos animales todavía hay una gran cantidad información que se desconoce. Los esfuerzos para juntar más han sido dejados de lado por el momento. Con el tema más apremiante de si los orangutanes seguirán sobreviviendo es comprensible que el dinero y el tiempo se estén gastando en esa causa.

Se espera que con los esfuerzos de conservación adecuados y un montón de la educación se pueda recuperar su población en las reservas. Sólo entonces los investigadores, una vez más, se sentirán lo suficientemente cómodos para volver a las teorías que se mantienen sobre su proceso de evolución. Estos son animales increíbles que sin duda han sido capaces de adaptarse a muchos cambios en su entorno, sin embargo, no están a la altura de los deseos de los seres humanos, irónicamente es la elección de los seres humanos salvarlos.